:::Nadie se disculpó conmigo por hacer las cosas que me hicieron...:::
Que te señalen por cómo respondiste al dolor pero nadie voltee a ver, que fue lo que te dolió en primer lugar. Es como si te empujaran al agua y luego te criticaran, por la desesperación con la que intentaste salir a flote. Muchas veces, esto pasa en los lugares donde más seguridad...deberíamos sentir: en casa, con la familia, con las personas, que se supone deberían cuidarnos . Te lastimaron con palabras, con silencios, con comparaciones, con ausencias ... pero cuando tú gritaste, cuando te encerraste en tu cuarto, cuando te volviste rebelde o callado, cuando explotaste o te alejaste . Ahí, sí tenían algo que decir sobre ti. “Eres muy sensible”, “siempre exageras”, “qué carácter tan feo tienes” , “no aguantas nada”. Y puede que no se preguntaron, el por qué reaccionaste así. Ni consideraron, que esa reacción era la única forma que tenías de decir “me están haciendo daño y no sé cómo pararlo” . Cuando somos niños o cuando estamos atrapados en dinámicas familiares disfuncionales, nuestr...
.png)







